Shoá y mesirut nefesh: la fuerza de enfrentarse a la muerte sin ceder al falso mesías
Shoá y mesirut nefesh: la fuerza de enfrentarse a la muerte sin ceder al falso mesías
El 27 de Enero es la fecha que la ONU declaró como día de recordatorio de las víctimas del Holocausto (Shoá).
¿Se relaciona ésto con los misioneros? Sí. La Shoá no ocurrió como un accidente aislado en la historia, la Shoá fue el climax del antisemitismo cristiano.
¿Sabía que los nazis afirmaban que ellos eran la verdadera descendencia de Israel (basados en el hecho de que el Tanaj dice que David era rubio)? decían que nosotros eramos "jázaros". Es algo falso, pero lo usaban en sus pretenciones racistas. Sí, exactamente como hoy afirman varias sectas misioneras sobre ellos mismos y sobre nosotros.
La Shoá fue el resultado de la mezcla peligrosa producto de la religión del nazareno: los evangelios, las cartas de Pablo, los escritos de los padres de la Iglesia, Lutero, el mito de los "Protocolos". Una sopa fatal de odio y muerte.
Para colmo, durante estos días terribles, el Papa Pio XII (solapador y alcahueta tanto de Hitler como de Mussolini) encomendó a varios sacerdotes "salvar judíos". ¿Cómo? a través de la conversión. Si no de adultos, pues de niños, pero como fuera necesario. Creía que muchos desesperados podrían verse tentados a abrazar al falso mesías.
Pero para la creencia del nazareno las cosas no resultaron fáciles. Las esperadas conversiones en masa no se dieron, los judíos no se movieron de su firme tradición y no abrazaron el madero de la mentira.
Hay una historia muy bonita, se trata de la historia de la melodía "Ani ma'amin", principio de Fe expuesto por el Rambam y que con una música angelical se convirtió en el himno de quienes morían en la shoá.
La letra dice: "Yo creo con fidelidad completa en que vendrá el mashiaj". Aún en los momentos de muerte y desespero, los judíos actuaban con mesirut nefesh enfrentándose a sus verdugos, como diciéndoles: yo no creo en ése falso mesías, yo permaneceré fiel completamente al hecho de que el mashiaj no ha venido, pero sé que vendrá y así demore, lo espero cada día sin importar las consecuencias.
Cito un extracto de Jabad sobre esta hermosa melodía:
El Rebbe de Modzitz, Rabbi Shaul Yedidya Elazar tuvo jasidim en varias de las grandes aldeas y ciudades de Polonia. Uno de ellos fue Rab Azriel David Fastag, quien era famoso por su voz en toda Varsovia.
Muchos venían a la sinagoga de Reb Azriel y su hermano, ambos bendecidos con hermosas voces, para participar en los rezos de Rosh Hashaná y Iom Kipur. Reb Azriel dirigía los rezos mientras su hermano lo acompañaba como coro. Sus voces vibrantes y claras tenían un profundo efecto en quienes los escuchaban.
...cielos oscuros se cernían sobre Europa -- las nubes del nazismo. Cuando los Nazis invadieron Polonia, los jasidim del Rebbe de Modzitz pudieron salvarle su vida a través de una travesía rumbo a Lituania, luego atravezando Rusia hasta Shangai (China) y eventualmente llegar por el oriente a América en 1940.
Mientras tanto en Polonia, decenas de miles de judíos eran embarcados diariamente en carretas y carros que alimentaban el sistema de ferrocarriles. Esposos eran separados de sus esposas, los niños, de sus padres, los muy ancianos con frecuencia eran asesinados en frente de sus familiares. Todos fueron enviados a los campos de exterminio.
Dentro de los vagones que se dirigían a Treblinka se podían escuchar personas llorando, niños gritando, otros hablando con voz baja y personas muriendo; pero había un vagón en el cual se escuchaba una canción.
Un anciano judío, envuelto en ropas harapientas y con su rostro blanco como la nieve se acercó a su vecino rogándole que le recordara por favor la melodía de Ma'areh Kohen que cantaba el Modzitzer Rebbe en el servicio de Iom Kipur.
"¿Ya? ¿justo en este momento deseas oir el nigun?" le respondió mirándolo con dureza, pensando que quizá todo el sufrimiento le habría causado locura.
Pero este jasid, Reb Azriel David Fastag, no pretó atención a la respuesta de su vecino, o a cualquiera en el tren. En su mente, se imaginaba parado al lado de su Rebe en Iom Kipur, siendo él quien guiaba los rezos de todos los jasidim.
De repente, frente a sus ojos aparecieron las palabras del decimotercer principio de la Fe Judía: "Ani ma'amin b'emuna shelema, b'viat hamashiaj; v'af al pi she'yitmameya, im kol zeh, ajakeh lo b'jol iom she'yavo -- "Yo creo con Fidelidad Completa en que vendrá el Mashiaj; y aunque él demore, de todas formas cada día espero su venida."
Cerrando sus ojos, meditó en estas palabras y pensó: "Justo ahora que todo parece perdido, la fe judía es puesta a prueba."
No mucho después comenzó a tararear estas palabras. Allí, en medio de la muerte y la desesperación de un tren rumbo a Treblinka, el jasid transformó su canción en un pilar, entonando con toda la fuerza de sus pulmones una canción sobre la eternidad del Pueblo Judío. No se daba cuenta del silencio del vagón y de los cientos que lo estaban escuchando con asombro. Tampoco escuchó las voces de aquellos que comenzaron a unirse a su melodía y cada vez cantaban con más fuerza.
La canción se esparció de vagón a vagón. Toda boca se unía a cantar el "Ani ma'amin" del Reb Azriel Dovid.
Como si se levantara de un sueño, Reb Azriel Dovid abrió sus ojos y miró a los presentes en el vagón. Sus ojos estaban rojos de tanto llorar, sus mejillas estaban mojadas de lágrimas. Con voz entrecortada gritó: "Le daré mitad de mi porción en el olam habá a aquel que lleve mi canción al Modzitzer Rebbe!"
Un halo de silencio descendió sobre el tren. Dos jóvenes que estaban allí prometieron llevar la canción al Rebbe a todo costo. Uno de ellos se montó sobre el otro y encontrando una pequeña abertura en el techo del tren, rompió la madera y abrió un hueco. Sacando su cabeza a cielo abierto, dijo: "veo que el cielo está azul sobre nosotros, las estrellas titilan y la luna nos mira."
-"¿Qué oyes?" le preguntó su compañero.
-"Escucho ángeles arriba cantando Ani ma'amin, ascendiendo a los siete cielos!"
Ambos lucharon por salir y lograron saltar uno después del otro. Uno de ellos murió instantáneamente por la caída del tren. El otro eventualmente encontró la forma de comunicarse enviando correos al Rebbe Shaul Yedidya Elazar en New York para que le hiciera llegar la melodía al hijo del Modzitzer Rebbe, el autor de Imrei Esh, quien vivía en Tel Aviv,
Cuando el Modzitzer Rebbe leyó las cartas que contenían la melodía del Ani Ma'amin compuesta por Reb Azriel Dovid, dijo: "Cuando ellos cantaron Ani Ma'amin en el tren de la muerte, los pilares del mundo temblaron. El Todopoderoso dijo: -Cuando los judíos canten Ani ma'amin, recordaré a los seis millones de víctimas y tendré misericordia del descanso de Mi Pueblo-"
Fue contado que el primer Iom Kipur que el Modzitzer Rebbe entonó la melodía de Ani Ma'amin, habían miles de judíos en el shul. La congregación entera rompió en llanto. La melodía rápidamente se extendió por todo el mundo judío.
"Con esta melodía" -dijo el Rebbe Shaul Yedidya Elazar, "los judíos fueron a las cámaras de gas. Y con este nigun, los judíos marcharán para dar la bienvenida al mesías."
Biographical note:
Rabbi Shaul Yedidya Elazer Taub (1886-1947), the second Modzitzer Rebbe, succeeded his father, Rabbi Israel, in 1920. At the outbreak of World War II he escaped Poland and made his way eventually to New York in 1940. He traveled extensively in the USA, bringing Torah and niggunim to many communities. He may have been the most prolific Chassidic composer of all time, with the total output numbering close to 1000 compositions. Some of them may be heard on the Modzitz website (www.Modzitz.org). He was also known for his extraordinary love for the Holy Land. On his fourth and last trip there in 1947 he intended to remain and settle, but he passed away that same year. He was the last person buried on the Mount of Olives in Jerusalem until after the Six Day War.
Comentarios
Lloré. siento como si estuviera allí. Ani Maamin, 1º soñé con HaMashiaj, el buscaba judíos y nadie se daba cuenta de que estaba allí, fue un sueño muy largo, ví su talón, ví su cara, al fin me uní a él, me cubrió con su manto. 2º soñé con Elihaju HaNaví vestía de lino, los pantalones remangados hasta la rodilla, me saludo con la mirada 3º Soñé con el 3º templo y yo estaba allí, canales de agua atravesaban la explanada, es más maravilloso que las maquetas, dibujos...era esplendoroso, y tan blanco! las guardianas era unas unas mujeres peculiares.
Ya no me importa tanto lo que piensen de mi, tenia que contarlo y fue aquí. Si alguien sabe porqué a una persona tan normal como yo, el Boré Olam la regaló estos y más sueños maravillosos...